Nadie, repito NADIE. Ni el más valiente, ni el más fuerte, ni el más cobarde,ni el más débil...
Nadie espera ese preciso momento en el que tienes que despedirte, decir Adiós y saber que nunca más podrás volver a ver a esa persona.
Aunque es verdad que todas las personas, tarde o temprano, se van. Pero... esas personas no se dan cuenta de todo lo que dejan atrás;todos los momentos que no podrán volver a vivir, todos esos familiares y amigos que no podrán volver a ver, todo...
Sin embargo, nosotros sí nos damos cuenta de la persona que falta, que nunca más estará,que no nos pudimos despedir de ella y que echaremos de menos.
Pero, a pesar de todo, estoy segura que aunque esas personas ya no estén y se hayan ido sin despedirse, sabrán siempre que les recordamos con una sonrisa... y lo más importante de todo...que les queremos.
